viernes, 10 de octubre de 2008

Y estaba haciendose la linda...


Este domingo (05/10), fui invitado por la familia Flamenco, al almuerzo que se realizaba en su casa con motivo al festejo de cumpleaños de Don Abel (mi suegro)...
Al despertarme cerca del medio día salí afuera y vi que el día era óptimo... entonces hice esta ecuación:

(Día Lindo + Día Domingo - Milicos Rompepelotas) x ganas de andar = Salir en mi VESPA

... y si fue. 
Pateé la moto, y como no podía ser de otra manera, a la segunda patada... PRRRRRRRRRR!!
(no piensen mal, quiero decir q la moto arranco).
Me puse los lentes, mi bolsito cruzado y salí hacia la casa de mi novia con el viento en la cara. 
(Para los que se preguntan si se sintio lindo, SI)

Cuando llegue (sin ningún inconveniente, detalle nunca poco importante) deje la moto con la pata en el patio. El almuerzo se desarrollo con total normalidad, todo muy lindo, todo muy rico... hasta que la salida del día anterior empezó a tener sus consecuencia y me dio muchisimo sueño, así que café por medio, me predispuse a irme a dormir una sietita a casa...
Al salir, vi que la moto NO estaba donde la había dejado, así que me acerque y...



estaba a la sombra haciéndose la linda...
Por lo visto Don Abel (gran amante y entendidisimo de las cosas clásicas, llamense muebles, autos, motos, relojes, etc) se percato del error que cometí al dejarla al sol, y la acomodo elegantemente junto a unas calas que hay en su jardín... un grande.

PD: Después tuve que escapar de los milicos que estaban por todo Tandil queriendome sacar mi moto que todavía no tiene ni un papel. Se me paro la moto 55236547654 veces y demás hierbas... pero eso es otra historia...

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Muy bonita la "pepa"

Un saludo desde el otro lado del Atlántico.

Anónimo dijo...

Hace dos semanas que no pones nada nuevo... ya parece una novela de echarri! Ladriiii! Te quiero!! ja

Bosh dijo...

Hay algo que se llama... laburar... y cuando uno labura... no puede vivir... y si no puede vivir... no tiene nada para contar...
QUE MIERDA!